Dra. Lorena Álvarez-Castañón
Departamento de Estudios Sociales
División Ciencias Sociales y Humanidades
Campus León, Universidad de Guanajuato
A tu hijo en la escuela, ¿lo motivan para ser emprendedor?, ¿le inyectan el gusto por la ciencia y la tecnología?; en tu universidad, ¿se crean empresas de base social o tecnológica?, o en tu empresa, ¿colaboran con las universidades o centros de investigación para desarrollar tecnología propia?, ¿usan mecanismos eficientes de transferencia de tecnología? Y tú, ¿qué tanto te involucras en la innovación?
¿Sabias qué en México hay un Sistema Nacional de Innovación (SNI)? A grosso modo el SNI es un sistema que busca generar nuevo conocimiento y progreso tecnológico mediante la interacción de distintos actores como son las empresas, universidades, instituciones del Estado, banca pública y privada, etcétera. Estas interacciones se delinean por las políticas públicas de innovación que pretenden poner las bases para que el país sea innovador y emprendedor; para que construya y desarrolle capacidades científicas y tecnológicas; para que se suba al tren del progreso tecnológico y genere las respuestas a los grandes problemas sociales y ambientales que enfrenta, como la desigualdad, la pobreza, el cambio climático, el agotamiento del agua, el colapso de los ecosistemas naturales y la contaminación.
A pesar de que México ha incrementado su gasto anual en investigación y desarrollo durante los últimos años (alrededor del 0.5% del PIB) y tiene programas exitosos como el PEI (Programa de Estímulos a la Innovación) o las Agendas Estatales de Innovación, los resultados del SNI no han sido los esperados. El SNI no funciona como debería; algo falla en el sistema que no permite generar ciencia y tecnología para todos. No es por mandato que ya seremos innovadores o emprendedores, se tienen que construir las condiciones, por tanto, es urgente que el SNI se reinvente y reoriente sus interacciones para lograr el dinamismo disruptivo en términos de ciencia, tecnología e innovación que el país demanda, con base en una política de innovación al alcance de todos.
El caos genera orden y el orden genera caos, en esa dilogía el SNI deberá mover, entre otros, a los sectores productivo, institucional y financiero; deberá rediseñarse e instrumentar la política de innovación a la mexicana.
Fecha de publicación: 11 de diciembre de 2016.
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