“Este premio fue la cúspide de mi trabajo como investigador joven”

Guadalajara, Jal.- El trabajo que ha desempeñado Javier González Contreras, egresado de Ingeniería Electrónica del ITESO en 1996, como profesor investigador en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, en la que ha trabajado en el campo médico con investigaciones encaminadas a desarrollar métodos no invasivos para diagnósticos y en el área de nanotecnología enfocada en el aprovechamiento de la luz solar, ha rendido frutos.

Uno de los más recientes logros que ha obtenido fue haber recibido el 13 de abril pasado el Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias (AMC), que se otorga desde hace 54 años a científicos menores de 40 años, por recomendación de un integrante de la AMC.

En la ceremonia, que tuvo lugar en la residencia oficial de Los Pinos, el presidente Enrique Peña Nieto entregó el premio a los ganadores de los últimos tres años. En el caso de González Contreras su reconocimiento fue anunciado en 2012, por su trabajo en el área de Ingeniería y Tecnología.

“Este premio fue la cúspide de mi trabajo como investigador joven y ahora empieza el trabajo de investigador consolidado”, dice González Contreras.

El desarrollo de nanoantenas

El egresado actualmente trabaja en un proyecto al que la Secretaría de Energía asignó 12 millones de pesos para el desarrollo de nanoantenas que aprovechen la energía solar. Uno de los retos es que el resultado final pueda comercializarse.

“Lo que vamos a hacer es utilizar estas nanoantenas para generar energía eléctrica a partir del sol, y la ventaja que tienen sobre las celdas solares es que las podemos sintonizar a cualquier banda de espectro solar”, detalla.

A diferencia de las celdas solares que sólo convierten en electricidad la luz visible, las que desarrolla González Contreras pueden hacer lo mismo con la luz infrarroja. “En el caso de comunidades marginadas donde utilizan el fogón para cocinar las puedes poner ahí para generar electricidad, de día y de noche”.

Estas nanoantenas se pueden hacer de material flexible y pueden usarse con ropa o un tapete para cargar celulares, radios o cualquier otro dispositivo.

“La mayoría de los investigadores están más enfocados a hacer publicaciones, no tienen pensado el desarrollo de un producto y esto sí lo enseñan en el ITESO”.

Tecnología aplicada a la salud
En el área de aplicaciones médicas, la investigación de González Contreras se enfoca en el desarrollo de biopsias ópticas para detectar enfermedades en la piel sin tener que extirpar tejido del paciente.

Como ejemplo menciona la enfermedad conocida como dermatitis atópica, ocasionada por la falta de la proteína filagrina; “la única forma de ver si tienes algún defecto en la proteína es con un análisis de sangre”, explica.

González Contreras y su equipo realizaron estudios en 30 recién nacidos usando la espectroscopia Raman, “que básicamente, es un láser. Le dimos seguimiento por un año y los que nosotros detectamos que tenían una menor concentración de espectroscopia Raman desarrollaron la enfermedad“.

“Es una forma de tamizaje, puedes decir antes de que se presente cualquier síntoma de la enfermedad si alguien es propenso a desarrollarla o no”, afirma.